ANIMACIÓN TRADICIONAL: cuerpo y alma en la ilusión de dar vida

Durante 2013, en el Taller de Cine "El Mate" se propuso un espacio para transitar las distintas técnicas de la ANIMACIÓN TRADICIONAL, aquellas que aún se ejecutan de la manera clásica, y mayormente no pueden ser reemplazadas con otros procedimientos.

El personaje, su orígen en papel y su estructura, hecha de alambre, en un primer momento

técnica: óleo sobre vidrio

Se planteó dentro de la Escuela como un contrapunto necesario a las posibilidades que nos brindan los "nuevos" medios audiovisuales -entre comillas porque la animación digital hace rato que no es nueva.

técnica: arena sobre vidrio

Como sea: con el fin de revalorizar las posibilidades de esta especialidad, demostrando que quienes gustan de la animación tienen mucho por hacer y descubrir también en este campo, y que estos procedimientos no se han vuelto antiguos porque son irreemplazables.


 Es una gran comodidad para cualquier artista ayudarse con una computadora, pero no hay un recurso que pueda sustituir el lápiz de un dibujante o el impulso orgánico que muestra un personaje corpóreo al cual podemos ubicar en diferentes poses sobre el escenario elegido.

Tampoco existe todavía un programa que pueda variar la distribución de pintura o arena sobre un vidrio creando formas animadas oníricas, fantasmagóricas que aparenten vida propia. En ciertas creaciones podemos construir un relato mágico en el que no hay una lógica, y nos divertimos con la disposición, la textura y las transformaciones.
El cambio y las diferencias se vuelven algo lúdico, una posibilidad con la cual jugar.
En este taller se practicaron diversas técnicas de autor, especialmente aquellas que son experimentales y bajo cámara, aprovechando el potencial actoral y sensible de quien le otorga movimiento. Conciliando diferentes objetivos de la actividad, promediando el año cada uno de los asistentes se hizo a sí mismo en versión muñequito:

trabajando con telas, espumas, hilos y alambre

Si mi personaje habla, será imprescindible que tenga boca, y manos para gesticular. En cambio, si camina, corre, o se desplaza de alguna manera, debe tener sustento firme y necesito que caminar sea una tarea fácil para él.

el perrito, su estructura hecha de alambre, músculos de espuma, pies de porcelana en frío.

Los chicos reconocieron la importancia de cada paso en la construcción del personaje, desde la idea hasta la realización para luego ponerlo sobre sus pies y "pedirle" que actúe.
En el universo de la ANIMACIÓN, en el que nada existe, hay que pensar muy bien qué y en qué orden para llegar a buen puerto. Y sentir así que aunque haya dado mucho trabajo, valió la pena 'animarse'.

La experiencia del Taller de ANIMACIÓN TRADICIONAL 2013 se tradujo en la película YO ME ANIMO: